El conflicto armado entre Israel y el grupo Hamas sumó un nuevo capítulo con dos ataques cruzados entre ambos sectores. Hamas lanzó misiles contra Tel Aviv, e Israel como respuesta envió un ataque aéreo a la ciudad de Rafah, que se llevó la vida de 50 personas en un campo de refugiados.
Según denunció la Media Luna Roja Palestina, la ofensiva de las tropas israelíes tuvo como objetivo un punto designado como "zona humanitaria" en el extremo sur de la Franja de Gaza.
"Las ambulancias están transportando un gran número de mártires y personas heridas después de que la ocupación [israelí] atacara las tiendas de campaña de personas desplazadas cerca de la sede de Naciones Unidas al noroeste de Rafah", señaló la organización humanitaria en sus redes sociales. El lugar, había sido designado por la ocupación israelí como zona humanitaria.
Previamente, Hamas había lanzado una serie de cohetes contra la ciudad de Tel Aviv. Se trató al menos de ocho misiles, algunos de los cuales fueron interceptados.
Paralelamente, la defensa civil de Gaza afirmó que recuperó seis cuerpos tras uno de los ataques aéreos contra una casa en el este de Rafah, donde Israel prosigue sus operaciones militares pese a que la Corte Internacional de Justicia (CIJ) le ordenó el viernes suspenderlas en este sector.
En ese contexto, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) ordenó la detención de las actividades y de cualquier otra acción que provocara la "destrucción física total o parcial" del pueblo palestino en Gaza y pidió a Hamas la liberación de todos los rehenes tomados desde el 7 de octubre pasado.
